Acceso a zona norte en el puerto de manzanillo

El 5 de noviembre de 2024, el Puerto de Manzanillo, uno de los más importantes de México y el de mayor actividad comercial en la costa del Pacífico, inauguró un nuevo acceso a su zona norte. Esta medida busca mejorar las operaciones logísticas del puerto, especialmente en lo que respecta al transporte terrestre de carga, que ha experimentado un crecimiento notable en los últimos meses.

La Administración del Sistema Portuario Nacional (Asipona) Manzanillo informó que la apertura de este segundo acceso traerá consigo importantes cambios en las rutas de circulación de los vehículos que ingresan y salen del puerto. Las unidades de autotransporte deberán seguir rutas específicas dependiendo de su destino y origen, lo que ayudará a organizar el flujo de camiones y evitar congestiones. Algunos de los ajustes incluyen rutas de acceso desde diversas localidades, como la carretera Pez Vela–Jalipa o la antigua carretera de Colima, entre otras.

Este esfuerzo se enmarca en un contexto de crecimiento en las operaciones del puerto. Entre enero y septiembre de 2024, Manzanillo ha recibido un total de 873,412 unidades de autotransporte, lo que representa un incremento del 19% en comparación con el mismo periodo del año anterior. Este aumento es una señal de la recuperación y expansión de las actividades portuarias, reflejando el papel clave del puerto en el comercio nacional e internacional.

En términos de manejo de carga, el puerto también ha mostrado un desempeño destacado. Durante los primeros nueve meses de este año, Manzanillo ha manejado 2,911,798 contenedores de 20 pies (TEUs), un 6.7% más que en el mismo periodo de 2023. Este crecimiento en la carga manejada resalta la importancia estratégica del puerto para la economía de México, especialmente en el comercio exterior y las cadenas de suministro globales.

Con la apertura de este nuevo acceso, se espera que el puerto pueda reducir los tiempos de espera para los transportistas, mejorar la eficiencia de las operaciones y enfrentar de manera más efectiva las dificultades logísticas que se habían presentado en los últimos tiempos, principalmente debido al aumento en el volumen de carga y al tráfico vehicular.

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